Daiya Momo

Kurayami al fín había sido aceptado como Mister y, a decir verdad, ya había pensado en su Pleasureboy... "Daiya Momo".
Hacía tiempo que observaba a aquel chico, desde que había llegado a G. Corporation, casi podría decirse que había llegado a obsesionarse con él, así que cuando le dijeron que era un Mister, lo primero que hizo fue mandarle llamar para que fuera a su habitación.

*Daiya estaba en la habitación de pruebas cuando lo llamaron al despacho del Director...allí le mandaron a una habitación...La habitacion de Kurayami Sentou...Su mister...si...se lo habían dicho ya...ese Mister...quería que Daiya Momo....se presentase en la habitacion...así lo hizo..fue dirigido hasta aquella habitación por el Subdirector...quien lo dejo frente a esta...baciló un momento antes de tocar...pero al final lo hizo....*

Daiya: Disculpe...*Dijo tras tocar y abrir despacio la puerta...para dejar ver su rostro asomar por una rendija de esta...pidiendo permiso...*

Oyó como llamaban a la puerta y vió aparecer el rostro de su deseado Daiya. No quería parecer ansioso, así que permaneció donde se encontraba.

*Adelante* le dijo.

Observó como el chico entraba cerrando la puerta tras de él. Lentamente, Kurayami caminó a su alrededor observándole en silencio.

*¿Sabes por qué te hicieron venir?*

*Daiya negó con la cabeza..."ellos" nunca daban explicaciones...*

Daiya: Solo se...que usted es un Mister...y me hicieron venir hasta aquí...solo eso...pero creo saber el porque...*Dijo sin mirarle a la cara...esa era una norma...nunca mires a un mister a la cara...hasta que no tengas su permiso...*

Kurayami sonrió complacido. El chico parecía obediente, al menos de momento. Colocándose frente a él acarició su rostro, apartando su cabello.

*¡Quitate la ropa!* le ordenó

*Daiya se sorprendió...eso quería decir...que sería su Mister...le habían asignado ya un mister...cerró los ojos un momento intenntando relajarse...luego procedió a quitarse la ropa lentamente bajo la mirada atenta de Kurayami...quedando completamente desnudo...*

Daiya: Lo que ordeno...*Dijo cuando se quito la ropa...haciendo saber que ya lo había realizado...*

Volvió a caminar a su alrededor mientras observaba su cuerpo desnudo. ¡Perfecto!, tal y como se había imaginado. Sus dedos recorrieron las curvas del menor, rozándolo apenas.

*Serás un buen ejemplar* dijo deteniendose de nuevo frente a él y cogiendole de la barbilla. Sus labios besaron al muchacho, degustandolo. Acarició su espalda, dejando sus manos caer hasta llegar a su entrada. Lentamente, la acarició e introdujo la punta de uno de sus dedos. El chico no pudo evitar gritar ante la sorpresa.
Kurayami sonrió ante la inocencia de su pleasureboy. Tenía una entrada muy estrecha..., iba a disfrutar mucho desvirgándole.

*A partir de ahora, vamos a vernos mucho tú y yo, así que supongo que puedes mirarme.

Separándose de él, cogió una de sus manos y la colocó sobre su entrepierna.

*Veamos que sabes hacer. ¡Prepárame!

*Daiya había sentido cada una de las caricias que el Mister le brindaba.....cada una de ellas...

Cuando levantó ligeramente su rostro y lo besó...le pareció dulce y suave...pero la mirada de ese hombre...le decía que ese solo era el comienzo...esos ojos negros...que reflejaban a noche...al igual que su pelo...

No pudo evitar un grito de sorpresa al sentir como la punta de uno de los dedos de su ahora Mister entraba por su ano...su sonrojo se hizo presente...Aún más cuando noto que una de las manos de "Su amo" agarraba una de las suyas y la ponía sobre la entrepierna del contrario...pidiéndole que "la preparase"...nunca lo había hecho con una de verdad...pero si con miles de juguetes sexuales...bajó hasta ponerse a la altura del miembro del mayor...quedando de rodillas...bajó el pantalón...y luego el boxer...siempre con ese sonrojo en su rostro...luego...el miembro del mayor escapó de su jaula...era bastante grande...nada comparado a esos simples juguetes...*

*Primero la lamió de arriba a bajo...con dulzura...sin prisas...para luego metersela completamente a la boca...dejando una parte por fuera...empezó con un vaiven lento...luego se la sacaba de la boca y lamia solo la cabeza de este....el miembro del mayor estaba completamente erecto...y este le brindaba suaves gemidos roncos...definitivamente...le habían enseñado bien lo básico y lo único que se aprendía sin un mister...la llamaban..."La preparación...para continuar con el dolor..." de lo demás...ya no tenían ni idea...o por lo menos...no Daiya....*

Notó como su miembro era lamido con habilidad y comenzo a gemir de placer. Sobre ese tema, no habría nada que enseñar al chico. Cuando su miembro estaba completamente erecto, sintió tentaciones de correrse en la boca del chico, pero aquel día no, aquel día tenían que llegar hasta el final. Para poder ser considerado el mister de Daiya, debía desvirgarlo. Y Kurayami enloquecía sólo con la idea.
Controlandose, retiró su pene del interior de su boca. Alzandole, le besó con fuerza mientras le llevaba hasta la cama y le posaba con delicadeza sobre ella.

* Ahora sentirás lo que provocas en mí * le dijo mientras comenzaba a masturbarle lentamente. Primero, con sus manos, luego con su lengua. Jugueteó con el miembro del chico tal y como él había hecho momentos antes con el suyo. No era ni mucho menos tan grande como el suyo, pero a él le pareció terriblemente apetecible.

*Daiya empezó a gemir casi descontrolado...tapándose la boca con una mano...le gustaba la sensación...era terriblemente ignotizante...su forma de acariciarle ...su forma de besarle y de lamerle...¿Eso era lo que provocaba en el mayor...?...pues ra exquisito...pero dentro de él estaba creciendo un pequeño miedo que se hacía más y más grande...eso solo era el principio...estaba seguro...completamente seguro de ello...aunque tal vez...no fuese así...*

*Los gemidos de Daiya eran dulces...bajos...a veces altos...alternando el sonido...pero todos estos eran amortiguados por una de sus manos...estaba algo avegonzado,...algo raro despues de todo lo que había hecho allí...solo que esto...era algo diferente...*

Los gemidos de Daiya eran realmente algo delicioso. Kurayami había introducido su pene en su boca mientras masajeaba suavemente sus testículos. El cuerpo del chico palpitaba bajo sus manos. Al poco, notó en su boca el líquido preseminal. Inmediatamente se separó de él. Había llegado el momento.
El mister se quitó la ropa, quedando a la vista del chico, después cogió un poco de lubricante y lo extendió en su pene y en la entrada del menor. Colocándose sobre él, besó su cuello intentando tranquilizarle. No sabía por qué tenía tanto cuidado con él, después de aquello, aquel chico sería violado de las formas más diversas y crueles en infinidad de ocasiones. Pero, entonces, ¿por qué intentaba que su primera vez fuese diferente? ¿Por que no hacerle ver de buenas a primeras qué era lo que le esperaba a partir de entonces?
Acarició los muslos del menor, antes de levantar sus piernas y acomodar su cuerpo entre ellas. Después le penetró.
Era tan dulce aquella sensación. La estrechez de su entrada que rodeaba todo su pene, aprisionándolo en su interior. A pesar de todo el cuidado que había procurado tener, la entrada del chico comenzó a sangrar. Kurayami no pudo controlarse más y empezó a moverse en su inteiror.

Daiya sentía como el momento se hacercaba...el mayor empezó a desvestirse...Daiya solo se quedó observando encimismado...era tan...tan perfecto...sintió como un líquido frio era pasado por su entrada...se estremeció por el contacto...sintió un suabe beso en el cuello...signo de que se acercaba...luego sus piernas fueron levantadas...sintió como el miembro del mayor rozaba su entrada e intentaba entrar...estaba estrecho...y a Daiya empezó a dolerle cuando el miembro empezaba a entrar...*

Daiya: AHHH MMMNN....*Se mordió el labio para apaciguar el dolor...dolía terrirblemente...sentió como un liquido empezaba a mancharle...lo más seguro es que se tratase de sangre...* AAHHH MNNN DUELE..AAHHNNNM*El mayor empezaba a embestirle sin nisiquiera esperar a que se acostumbrase...pero aún así estaba siendo amable...¿por que...? en ese instante le daba igual...solo quería que ese dolor se retirase...dejando entrar el placer que siempre describian...*

*Daiya * le susurró al oido * aguanta un poco más. Voy a meterla toda en tu interior, ¿me entiendes?
Con una estocada violenta, introdujo por completo su miembro dentro de él. El chico gritó ante aquella invasión y el mister reprimió un profundo lamento de placer. Kurayami continuó moviéndose y sus propios gemidos se unieron a los de él.

* Ahora, al fín me perteneces, Daiya * le dijo sin parar de golpearle. Sus manos se posaron sobre la tersa piel del muchacho, acariciándole.

Daiya: AAHHHHH*Gritó al sentir la inbacion completada...Su mister comenzó a moverse...estocadas rápidas y limpias...empezando a sentir un creciente placer...*

Daiya: Ahhhh mnnn AAaaaahhh Misterr mnnn aaaahhhh *Sintió como las manos del mayor recorrian su piel...dejando escapar más y más gemidos de los labios de Daiya...tambien del mayor quien dejaba escapar gemidos roncos...*Ahhhh mister!!! mister! aaahhh mmnnnn

Kurayami enloquecía ante el movimento de Daiya. Aún era algo tosco, pero para eso estaba él. Daiya era como su nombre, un diamante en bruto, y Kurayami sería el encargado de pulirlo, de conseguir que aquella piedra brillara algún día en toda su intensidad.
El rostro del chico comenzaba a sonrojarse y su mister lamió su cuello con lujuria, acariciando su nuca, introduciendo sus dedos en su cabello.

* mmmmm, tu interior es delicioso, Daiya, cálido y húmedo... * le susurró al oido * Me muero por violarte cada noche.


Una sonrisa pícara apareció en su rostro mientras su mano se deslizaba al miembro del chico y comenzaba a masturbarlo.

Daiya: Ahhhh sii.aaMister...ahhh mmnnnmmm*Oyó las calientes palabras de su mister...lo volvían algo agitado...no paraba de gemir...le parecía tan doloroso y placentero...se sentía morir a cada embestida...sintió como una mano de su "amo" empezaba a acariciar su miembro...masturbandole...*

Daiya: Ahhh aaaammm aahhh Mister....ahhaa *Sus manos se aferraban a las sábanas...estaba a punto de ocurrir algo nuevo...y no aguantaría mucho más...* Ahhh aamnn no...no aguantaré aaammnn mucho más aaaahhh Mister!!!!!!

Notó como el chico estaba a punto de correrse y frunció el ceño. Demasiado pronto...
Su mano se cerró sobre el miembro del chico impidiendo que se corriera.

*No creo haberte dado permiso para acabar* le dijo molesto.

Sus movimientos se intensificaron haciendo caso omiso de las súplicas del menor que sufría al ver impedido su desahogo. El calor y una sensación de bienestar se apoderaban poco a poco del mister, llevandolo poco a poco al inevitable final. Su respiración se volvió más agitada.

*Da..i..yaaa*

Su voz se quebró al llegar al climax final. Violentamente, se corrió en el interior del chico, soltando entonces su miembro para poder compartir con él aquel momento. Al hacerlo, el muchacho soltó al fin todo lo que había estado reteniendo.

Daiya: AAHHKK....*Sintió como su mister apretó su miembro impidiendo que el liquido saliese de si...empezó a desesperarse...sus gemidos aumentaron y su color de piel tambien...sentía las insesantes embestidas del mayor...no aguantaba...el líquido tenía que salir ya...*

Daiya: Por...por aaahhhfavor...Mister aaahhh no aguanto!!! Aahhhhh *Suplicaba...intento estupido de su parte pues su mister pasaba olimpicamente...pero algo le decía que el tambien estaba a punto...ya que empezó a respirar agitado...y las embestidas crecieron a mayor velocidad...hasta que el inevitable final llegó...sintió como el mayor le llenaba con su líquido...cálido...llenandole...y casi al instante soltó al fin su miembro dejando que se corriese...salpicando el pecho de su mister y el suyo propio...con un leve grito...

Por fín, por fin aquel cuerpo que había deseado por tanto tiempo le pertenecía. Jamás pensó que disfrutaría tanto poseyéndole, notándole palpitar de deseo bajo sus brazos. Se separó del chico, poco a poco cuando observó como su pecho se había manchado con el semen de su pleasureboy. Como Kurayami hubiera lamido aquella delicia, como Mister, no podía permitirlo.
Cogío del pelo a Daiya aún jadeante y le levantó con rudeza.

* ¡Limpialo! * le ordenó con el ceño fruncido.

*Daiya soltó un leve gemido de molestias cuando lo agarró del cabello...su rostro aún estaba sonrojado...y cuando vio aquella escena se sonrojo un poco más...con cautela se acercó al pecho de su mister...y con algo de vergüenza empezó a lamer aquella sustancia...aquella sustancia que momentos antes había estado en su interior...lo hacía con desagrado...y sin anímos...era demasiado vergonsozo...pensar que le esperarian cosas peores...mucho peores le ponía los pelos de punto...llegó un momento en que se separó del pecho...le parecía algo...sucio...lo que hacía...se limpio la boca con un poco de desagrado...*

Daiya: Lo siento...pero yo...no creo que esto...*Silencio cuando el mayor lo miró...* Yo...

*Tú, ¿qué?* le preguntó molesto.

Había notado las reticencias de Daiya a la hora de cumplir la última orden que le había dado, y no le había gustado.

*¡Escuchame bien!* le dijo volviendo a cogerlo de su pelo *Hoy he sido muy considerado contigo. No creas que siempre será así. Si me llevas la contraria descubriras cómo puedo hacerte sufrir*

Su mirada se clavó en la del chico, amenazadora.

*Hay dos cosas que tienes que tener en cuenta para ser un buen pleasureboy. Una, es que nunca debes dejar a tu cliente a medias. La segunda, es que si le ensucias, debes limpiarle, ¡sin protestas! ¡y debes demostrar que te gusta hacerlo, aunque no sea así!*

Con fuerza tiró al suelo al chico mientras se levantaba de la cama observando los restos que aún permanecían en su cuerpo por culpa de aquel incopetente. ¡Perfecto! ¡Ahora tendría que ducharse...!

Daiya: Arg...*Gimió cuando cayó al suelo...se había asutado por el comportamiento del hombre...pero tenía razón...sino cumplia...le podían pasar cosas peores...y si era un Pleasureboy...tenía que aprender de su Mister...tal vez...si volvía a intentarlo...Daiya se acercó a el gateando...sumiso...se quedó a rrodillado y llego al abdomen de su Mister...el cual seguía sucio...acercó su rostro...*

Daiya: Perdoneme...amo...*Dijo empezando a lamer la sustancia...esta vez...con deleite...seguía sin gustarle...pero no quería más problemas...pasaba su lengua por todo el lugar...llegando hasta el ombligo del mayor...y volviéndo a subir un poco...*

Vió como Daiya se acercaba a él gateando y le pedía perdón mientras cumplía su cometido, esta vez sin protestas. Por fín parecía que el chico comenzaba a comprender.
La lengua del chico sobre su abdómen provocó un cosquilleo en el cuerpo de Kurayami. Era tan excitante verle allí arrodillado frente a él, lamiendo su cuerpo. Cerró sus ojos y una sonrisa se dibujó en su rostro.

*Buen chico* le dijo acariciando su pelo con suavidad.

Cuando acabó, el mister se agachó para besar sus labios.

*Bien hecho. Ahora, vistete y descansa un poco* le dijo con suavidad * Nos vemos a la tarde en la sala de pruebas*

*Daiya degustó el suave sabor de los labios de su Mister...eran ipnotizante ese sabor...cuando terminó sono un pequeño gemido de disgusto...luego oyó con tranquilidad lo que le decía el hombre...Kurayami Sentou...se fue levantando cuando el mayor desapareció de su vista dirigiéndose al baño...agarró sus ropas y empezó a colocarselas...cuando llegase a su habitacion lo primero que haría sería darse una ducha...sentía la sustacia entre sus piernas...y tenía restos de si mismo en el pecho...

Su entrada estaba dolorida...esa era su primera vez...tan dulce y tan amarga a la vez...pero lo que si tenía claro...es que aquel hombre...todo de él...se habia quedado grabado en su cuerpo y mente...ipnotizandole...tanto su lado suave...como su lado rudo...o tal vez...era por que se había clavado en el...la sensacion de tenerle dentro...perteneciendole solo a ese sujeto...a ese hombre...a su Mister...a su amo...*